sábado, 26 de noviembre de 2011

Paredes ensangrentadas


¡Hola a todos! Quiero contarles en esta cabecera de entrada que la nueva modalidad que adopte en mi blog para contar historias que ustedes me envíen superó todas las expectativas que hubiese imaginado para este proyecto con las historias de Rebecca y Estrella.

Ahora bien, cuando Fernando Di Filippo del blog http://letrasxletra.blogspot.com/ me preguntó:

 -“esta es mi historia… ¿Te animás a contarla?”

Luego de meditar un rato le conteste que sí. Porque después de conocer su historia no hay un vuelta atrás… para nadie… y menos para mí. Por eso este blog que está pensado para albergar poesía e historias de amor, hoy presenta una historia distinta, la de un hombre y la expectativa por su vida en horrorosas circunstancias.


Te recomiendo apagar la música del reproductor da la página y leer en silencio

Cuidado: Quiero comunicarte antes de que te aprestes a leer esta historia que la misma tiene un relato inapropiado para menores  y que el contenido  puede llegar a herir tu susceptibilidad o la de alguna otra persona.


PAREDES ENSANGRENTADAS



La gota de agua se colgó, por un momento, en el pico de la canilla, suspendiendo su sonido en el silencio antes de crear una lágrima y dejarse caer en la irremediable rutina de estrellar su chasquido contra el piso.

La canilla escondida en la oscuridad se burlaba así, con su repetido Clac… Clac… de los prisioneros, quienes dejaban que sus ahogadas respiraciones y gemidos escaparan como babosas trepando las paredes en busca de libertad, la misma que ellos deseaban, sobre las grises paredes de cemento patinadas de humedad, sudor, sangre y moho adherido.

Caía la gota…

                              Clac… la angustia.

                              Clac… la consternación.

                              Clac… el miedo.

Flotando en el aire, irrespirable, palpable, junto al olor a sangre que cala dentro de las fosas nasales y asquea, dentro de la boca, en cada papila con su gusto a caldo hediondo y repulsivo.
Fernando. Sentado en el piso y con sus manos esposadas en la espalda remueve y tensa su cuerpo al escuchar aterrado los pasos que se acercan por el pasillo…

                             Clac… el espanto…

                             Clac… el pánico…

Cierra fuerte los ojos, en un acto reflejo e innecesario porque igualmente el apretado vendaje que los cubren, no le dejan ver nada. Siente chirriar al pesado hierro del pasador abriendo las rejas para buscar su presa… Pero, en otra puerta y en otra celda… allá, al final del pasillo… Golpes…Un cuerpo que se resiste…más golpes…un cuerpo reducido es arrastrado fuera, a la incertidumbre de su destino.

Fernando pensó que pronto le tocaría a él...

¿Cuánto tiempo había pasado, desde que lo secuestraron y metieron en ese oscuro pozo de cemento?  Meses… Era difícil llevar la cuenta de los días en la purga de la única culpa que podría achacársele: Ser un joven estudiante de arquitectura y filosofía donde algunos de los compañeros de estudios acostumbraban hablar en voz alta sobre los sueños de un país mejor que el hasta entonces conocido.

¿Cuánto tiempo, en ese lugar? Ni él lo sabía, ni siquiera sabía dónde estaba. Quizás en un sótano dentro de alguna edificación erguida como cualquier otra en una ciudad donde la gente iba y venía, justificándose con sus “No sé”, “A mí no me importa” y el “algo habrán hecho” tan difundido.

Eran tiempos difíciles en la Argentina. Tiempos de uniformes verde oliva bajando de los camiones, por el día. Con borceguíes y fusiles derribando puertas y secuestrando hombres, mujeres y niños, por las noches…

Tiempos de terror…

De desaparecidos…

De madres requiriendo por sus hijos faltantes, mojando con lágrimas de dolor los extremos de esos pañuelos blancos atados en la cabeza, reclamando ante estoicos generales declamantes de discursos mentirosos en disfraz del cruel genocidio.

Eran tiempos de horror para los secuestrados/desaparecidos. Donde su única verdad era saberse muertos. Próximos a ser arrojados vivos desde aviones a gran altura sobre el mar o ejecutados y enterrados en tumbas comunes, exentas de cruces y de nombres, en lugares escondidos.

Un año duró el tormento…Imposible contar lo que Fernando escuchó, vio y sufrió durante ese encierro repleto de penurias, torturas y muertes. Muertes que no eran la suya y que, aún hoy, no sabe porqué esta vivo.

                             Clac… el horror…

Un día alguien le grito:

-¡Mira acá hijo de p…!

Obediente, de temor, se quitó las vendas de los ojos para ver petrificado como un desconocido de uniforme verde le disparaba un balazo en medio de la frente a un niño que no alcanzaba los siete años…

-¡El próximo sos vos! – Le gritó - ¡Ahora, Metete de vuelta en tu cueva!

Y en ese instante se supo más muerto, con la entera certeza de estar ya sin vida…

Pero, esa amenaza no se cumplió… Un buen día, la esperanza lo cargo en sus brazos y lo trajo de regreso a la vida. En un giro sorprendente de un acaso que nunca explicó por qué lo liberaron y mucho menos por qué lo habían detenido.

Cuando lo soltaban, se escuchaban por detrás los claques, de la canilla, incesantes y repetidos.

                              Un clac… de ilusión…

                              Un clac… de esperanza…

                              Un clac… para la vida…
...

Video sugerido por Fernando: La memoria - Leon Gieco
Acuerdate de apagar el reproductor de la página a la derecha antes de dar play al video



63 comentarios:

  1. El secuestro, el año de detenido/desaparecido y el episodio del niño corresponden al relato real de Fernando. Todo lo demás es fruto de la imaginación y solo acude en recurso para el armado y presentación de la historia.

    ResponderEliminar
  2. Esta vez y gracias a Dios, el desenlace fue feliz, aunque entristece recordar que otr@s muchos no lo consiguieron. Emotiva historia amigo.
    Mis cariños Daniel y feliz finde.

    ResponderEliminar
  3. Muy interesante la veta que has abierto para dar rienda suelta a tu creatividad.
    Excelente te ha quedado la historia, sólo un detalle, me parece que debes revisar los puntos suspensivos, pero como lo veas, eres el creador. Mis felicitaciones Daniel Eduardo y por tu iniciativa y su éxito.

    ResponderEliminar
  4. Querida Leticia:

    Me pone contento que te haya gustado la historia
    Pongo mucho de mi para que así sea.

    Se que uso y abuso de los puntos suspensivos y es porque no conozco otra forma de expresar los silencios.
    Quizás no sea lo correcto gramaticalmente. Pero de la misma forma que encuentro que los silencios aportan a la música, los silencios viven en mi prosa. Basta que veas otras entradas para confirmarlo.
    Lee mi perfil "Devenido escritor y poeta" No soy un académico ni tengo mas estudio que los golpes de la vida.
    Solo soy un hombre común escribiendo.
    Igualmente te agradezco la sugerencia que sé me das con tu mejor intención.
    Pero... ya vez, los puntos...viven en mi prosa.
    Al menos hasta que alguien se ocupe de mi y me explique una manera mejor de expresar los silencios y que no sea la tan sencilla palabra.
    Si te place a ti o a cualquiera corregirme en esto aquí mi correo personal.
    Yo humildemente agradecido.

    nidaeldore@hotmail.com

    Un abrazo grande
    y gracias por visitar mi casa
    Sabes que también te sigo

    Tamally maak

    ResponderEliminar
  5. Desgarrador relato mi querido amigo, afortunadamente con un final feliz para el protagonista, lástima por los que cayeron antes esto.

    Preciosa iniciativa la tuya que te honra, tu reto lo estás llevando a buen puerto, cosa que me alegra mucho por ti amigo mío.

    Un fuerte abrazo con lazos de mi amistad.

    ResponderEliminar
  6. Impresionante historia con un final inesperadamente feliz.
    Para alegría del lector sobrecogido de angustia.
    Siempre es terrible la crueldad de la más dura realidad.
    Besos a ambos.

    ResponderEliminar
  7. Un relato muy fuerte..
    Una historia verdaderamente muy cruel.
    El final afortunado ..pero con tristeza de lo que ha vivido
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  8. Por Dios, cuantos recuerdos, terribles e increíbles. Yo era apenas un ignorante adolescente en esa época de nuestra Argentina.Pero cuando las cosas comenzaron a saberse y tome conciencia no podía creer que a nuestro alrededor hubiera tanta maldad e impunidad.
    Ya nada volvió a ser igual para nosotros.
    Preciosa tu narración, has tenido mucho tacto para contar el horror vivido en aquella época.
    Un beso.....

    P.D: un abrazo para Fernando y voy con ganas a conocerlo.

    ResponderEliminar
  9. Te agradezco la ocasión para conocer a Fernando,gracias Daniel,por tu estremecedor relato y por saber contarlo,por poner tanto cariño en cada palabra,el video es tremendo.
    No olvidar nunca,para que no vuelva a suceder.

    Hola Fernando!!
    No puedo imaginar por lo que pasaste,el sufrimiento que padeciste y el temor en cada instante de que tú fueras el siguiente,terrible la muerte de un niño y cómo disfrutaron haciéndolo,me cuesta creer que existan personas de ese calibre y sin embargo es cierto.

    Nunca más,fuera ese horror sin sentido y sin razón!!
    Un fuerte abrazo Fernando!!
    Un beso Daniel!!

    ResponderEliminar
  10. Un proyecto magnífico, de ahí la acogida.
    Esta historia es estremecedora, hasta escuchamos la gota alterando la rutina.
    Dura realidad que terminó en aciago final para tantos.
    Un abrazo cariñoso, Daniel y mi sincera enhorabuena.
    (Yo también abuso de los ... para expresar los silencios y ¡me gusta esa mínima pausa que crea en la lectura!)

    ResponderEliminar
  11. Daniel,ese "clac...clac" del relato es fundamental para ser consciente de esos segundos,que matan poco a poco la esperanza y al mismo tiempo la renuevan,la van alargando y dando al protagonista y al narrador el temple y la fortaleza necesaria para aguantar y seguir adelante con la vida y el relato.
    Te felicito,porque te gustan los retos,amigo.
    Mi abrazo inmenso para los dos,os siento unidos en comprensión y empatía...y ello me satisface,porque cuando profundizo y veo grandeza interior en los demás...es una gozada para mi...!
    FELIZ FIN DE SEMANA PARA LOS DOS,AMIGOS.
    M.Jesús

    ResponderEliminar
  12. hubo una época en américa latina en donde hiistorias como estas eran pan diariao, muchas con finales menos afortunados y otros que aún están buscando el final y otros que murieron esperando el final, otros que heredaron la busqueda de ese fina y otros que se ríes de aquellos que siguen y que esperan y que murieron y que heredan el final

    un abrazo y buen fin de semana

    ResponderEliminar
  13. Un relato que estremeció todo mi ser y que trajo a mi memoria, tiempos del horror vivido.
    Lo narras de una forma tan real, que de verdad sobrecoge, te felicito.
    Besitos en el aloma para los dos, para ti y para Fernando
    Scarlet2807

    ResponderEliminar
  14. .
    Leo y digo.
    Final Feliz ???
    Terminó el relato, nunca terminará la historia sin final.
    Gracias Daniel.

    ResponderEliminar
  15. Un desgarrador relato con un final feliz para el protagonista, pena que sucedieran esas cosas.

    Felicidades por tu buen hacer.
    Besos.

    ResponderEliminar
  16. uff..que historia tan fuerte, me alegro que Fernando haya sobrevivido a esto, debe ser terrible estar privado de la libertad bajo esas circunstancias y más aún tener la certeza que serás el próximo a ejecutar sin siquiera haber un motivo real para ello... Debe ser muy doloroso para Fernando recordar este episodio en su vida.

    Gracias Fernando por compartir tu historia.
    Gracias Daniel, excelente relato... lo de los puntos suspensivos tambien a mi me sucede y tambien pienso que gramaticalmente estamos mal, pero al igual que tú, es una forma de manifestar los silencios..todo esta bien, no pasa nada amigo..
    El video excelente para esta historia.

    Buen fín de semana.
    Besos.
    (estaré al pendiente de lo otro)

    ResponderEliminar
  17. Me recordó cuando mi país estuvo en dictadura, fue muy fuerte como esta historia.
    Besitos de Arte.

    ResponderEliminar
  18. Tal vez a nuestra muerte el alma emigre:
    a una hormiga,
    a un árbol,
    a un tigre de bengala;
    mientras nuestro cuerpo se disgrega
    entre gusanos
    y se filtra en la tierra sin memoria,
    para ascender luego por los tallos y las hojas,
    y convertirse en heliotropo o yuyo,
    y después en alimento del ganado,
    y así en sangre anónima y zoológica,
    en esqueleto,
    en excremento.

    Tal vez le toque un destino más horrendo
    en el cuerpo de un niño
    que un día hará poemas o novelas,
    y que en sus oscuras angustias
    (sin saberlo)
    purgara sus antiguos pecados de guerrero o criminal,
    o revivirá pavores,
    el temor de una gacela,
    la asquerosa fealdad de comadreja,
    su turbia condición de feto, cíclope o lagarto,
    su fama de prostituta o pitonisa,
    sus remotas soledades,
    sus olvidadas cobardías y traiciones.

    Ernesto Sábato ( de " Sobre Heroes y Tunbas" )

    ResponderEliminar
  19. Paso más tiempo mirando el miedo que pensándolo ausente.
    Ellos ya no están.
    Ellos ya se fueron.
    Mi memoria no alcanza para recordar tanto horror.
    Pero allí me tuvieron, envuelto en la irrespirable gravedad de la muerte. Y hoy aquí la sigo esperando.
    Ellos ya se fueron.
    Nada ha pasado, De eso sí sé. La fragilidad de la memoria entierra recuerdos que torturan,
    Tortura como esa que tanto se ha olvidado.
    Ellos ya se fueron.
    Nos legaron el miedo.
    A que juego están jugando si se saben olvidados.
    A ninguno.
    Esperan en la retorcida sombra de un lento purgatorio.
    Allí quedarán, y a ellos, si a ellos, también los habrá comido el olvido, el putrefacto olvido
    El tiempo y la estúpida sinrazón los retienen, sus vísceras fétidas malolientes no llegarán a apestar la tierra .

    Silencio,

    “ Nunca más “.

    FERNANDO DI FILIPPO

    ResponderEliminar
  20. Ufff! Que fuerte!! Muy bien escrito, te felicito, y de igual manera al protagonista de este relato. Un final afortunado!


    Sawabona!!

    ResponderEliminar
  21. La crueldad, como cualquier otro vicio, no requiere ningún motivo para ser practicada, apenas oportunidad.
    Mary Ann Evans

    La crueldad, como cualquier otro vicio, no requiere ningún motivo para ser practicada, apenas oportunidad.
    Mary Ann Evans

    La brutalidad contra un animal es crueldad hacia la humanidad, lo único que cambia es la víctima.
    Alphonse De Lamartine

    La crueldad es a menudo el signo de una insatisfacción interior que anhela un narcótico; y también lo es una cierta desconsideración cruel del pensamiento.
    Friedrich Nietzsche

    ResponderEliminar
  22. Dani: tu relato como siempre impecable ,hasta en esta triste historia ,cuanto padecimiento, y dolor para fernando, que si bien lo dejaron en libertad, lo que nunca podrá liberar es todo el daño psicologíco es un fantasma que estará por siempre admiro su valentia

    ResponderEliminar
  23. Una historia desgarradora que has sabido contar con maestría.
    Un abrazo para el protagonista y otro para ti.

    ResponderEliminar
  24. SIN TIEMPO, SIN AYERES NI MAÑANAS

    …hoy he perdido un amigo…mi amigo…

    …la celda fría…tensa…aromas aturdidos en la memoria…memoria ya olvidada…muros sin luz…muros sin color…muros derrumbados en deseo de libertad…libertad atrapada…libertad ignorada…despreciada…

    …pasos contundentes…pasos firmes…pasos sin remedio…ruido a muerte cercana…ruido acompasado…caminante para el olvido…solo ruido…ruido en silencio…silencio de espera…

    …metales consonantes…llaves con ritmos confiados…sin música…sin letra…campanillas apenas gimiendo… metales luchando entre ellos…su pronta respuesta obediente cederá el paso del camino a la muerte…

    …la danza presente…la música acompaña con sórdido placer, llaves…girar…girar…danza sensual…danza obscena…danza de rito vulgar…danza de final sin esperar…danza que abre a la luz que poco a de brillar…cómplice Bocallabe...

    …un camino…un camino no conocido…brillante de grises…negros…blancos…ausentes colores no recordados que una vez fueron suspiros en el alma….un camino callado acompañante del miedo…un camino que lo ha de olvidar….

    …silencios…impenetrables silencios envuelven al perdido ruido…inmundos silencios… silencios opacados por un corazón gritando…vociferando latidos sin compás…alocados movimientos que quiebran al llanto…llanto que llega…llanto que estalla por dentro…sufrires del alma quebrada…dolores sin suspiros sin suspenso…

    …la hora…irreverente tiempo…imposible contra él…todopoderoso…implacable…inexorable devenir…tiempo incapaz de ser…tiempo incapaz de dejar de ser…tiempo insolente recordando la hora que ya es…

    …soledades… soledades que esperan…ya llegó el momento…ese momento que nunca debió haber llagado.. llegó…

    …aquellos ruidos de metales consonantes…asonantes…repiten el rito…pequeños vástagos repiten sus compases.. repiten sus sensuales giros en danza obscena…repiten…repiten…repiten…

    …solo ese grito final quedará en mí…
    …todo ha terminado…
    …he perdido un amigo…la paz te acompañe…

    …silencio…

    …he perdido un amigo…la paz lo acompañe…
    …a ganado su libertad…se ha cumplido su condena…
    …solo quedo entre los desolados muros…
    …yo y su recuerdo…su recuerdo y yo…
    …avatares del destino…
    …dibujos de la vida…
    …el sordo y seco ruido de un disparo
    …a asestando en un cuepo..
    …mi amigo…
    …mi grito…
    ...la muerte puso fin a la pesadilla…
    …grito, grito, grito,

    Amigo,es que no te das cuenta............
    AMIGO ERES LIBRE…LIBRE

    FERNANDO DI FILIPPO

    ResponderEliminar
  25. Estremecedor! Espero que lo que queda en la memoria no le dañe y siga su vida de manera algo normal. Siempre digo que el poder es debilidad disfraza, pero qué daño más innecesario hace!

    Un abrazo y un beso a los dos!

    ResponderEliminar
  26. Que horrible vivencia y que incomprensible situación. Es una historia cruda y que desgarra muy dentro, difícil ponerse en la piel de Fernando.

    Besitos.

    ResponderEliminar
  27. Desgarrador relato de un episodio como tantos que ocurrieron en mi patria, en una época nefasta, donde a sanfre y fuego, se escribieron las páginas más horrendas de nuestra historia.
    Profundamente conmovida. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  28. Que intenso, me mantuviste conectada con el relato desde la primera palabra, tu forma de escribir es impecable.
    saludos.

    ResponderEliminar
  29. hola Dani, de nuevo yo, Rebecca^^
    lamentablemente no puedo ver el video aqui en Alemania, lo que sí pude escuchar fue el video de la canción de León Gieco con su guitarra con "La Memoria."

    He aquí el texto de dicha canción:


    Los viejos amores que no están,
    la ilusión de los que perdieron,
    todas las promesas que se van,
    y los que en cualquier guerra se cayeron.
    Todo está guardado en la memoria,
    sueño de la vida y de la historia.

    El engaño y la complicidad
    de los genocidas que están sueltos,
    el indulto y el punto final
    a las bestias de aquel infierno.

    Todo está guardado en la memoria,
    sueño de la vida y de la historia.

    La memoria despierta para herir
    a los pueblos dormidos
    que no la dejan vivir
    libre como el viento.

    Los desaparecidos que se buscan
    con el color de sus nacimientos,
    el hambre y la abundancia que se juntan,
    el mal trato con su mal recuerdo.

    Todo está clavado en la memoria,
    espina de la vida y de la historia.

    Dos mil comerían por un año
    con lo que cuesta un minuto militar
    Cuántos dejarían de ser esclavos
    por el precio de una bomba al mar.

    Todo está clavado en la memoria,
    espina de la vida y de la historia.

    La memoria pincha hasta sangrar,
    a los pueblos que la amarran
    y no la dejan andar
    libre como el viento.

    Todos los muertos de la A.M.I.A.
    y los de la Embajada de Israel,
    el poder secreto de las armas,
    la justicia que mira y no ve.

    Todo está escondido en la memoria,
    refugio de la vida y de la historia.

    Fue cuando se callaron las iglesias,
    fue cuando el fútbol se lo comió todo,
    que los padres palotinos y Angelelli
    dejaron su sangre en el lodo.

    Todo está escondido en la memoria,
    refugio de la vida y de la historia.

    La memoria estalla hasta vencer
    a los pueblos que la aplastan
    y que no la dejan ser
    libre como el viento.

    La bala a Chico Méndez en Brasil,
    150.000 guatemaltecos,
    los mineros que enfrentan al fusil,
    represión estudiantil en México.

    Todo está cargado en la memoria,
    arma de la vida y de la historia.

    América con almas destruidas,
    los chicos que mata el escuadrón,
    suplicio de Mugica por las villas,
    dignidad de Rodolfo Walsh.

    Todo está cargado en la memoria,
    arma de la vida y de la historia.

    La memoria apunta hasta matar
    a los pueblos que la callan
    y no la dejan volar
    libre como el viento.

    Fuente: musica.com


    Un fuerte abrazo^^

    ResponderEliminar
  30. hola Fernando,
    bonita lección... la de los puntos suspensivos...^^

    un fuerte abrazo a ti, Fernando, por tu historia.

    Un fuerte abrazo a ti, Daniel, por tu narración

    a vosotros dos, una sonrisa^^

    ResponderEliminar
  31. Como La Cigarra de María Elena Walsh

    Tantas veces me mataron
    tantas veces me morí
    sin embargo estoy aquí
    resucitando.
    Gracias doy a la desgracia
    y a la mano con puñal
    porque me mató tan mal
    y seguí cantando.

    Tantas veces me borraron
    tantas desaparecí
    a mi propio entierro fui
    sola y llorando.
    Hice un nudo en el pañuelo
    pero me olvidé después
    que no era la última vez
    y volví cantando.

    Tantas veces te mataron
    tantas resucitarás
    tantas noches pasarás
    desesperando.
    A la hora del naufragio
    y la de la oscuridad
    alguien te rescatará
    para ir cantando.

    Cantando al sol como la cigarra
    después de un año bajo la tierra
    igual que sobreviente
    que vuelve de la guerra.

    ResponderEliminar
  32. Absolutamente conmovedor, muchos países hemos sido víctimas de éstas atrocidades.

    NUNCA MÁS!!!

    Gracias Dani por relatar con maestría la historia de Fernando.

    Abrazos para ambos.

    ResponderEliminar
  33. Un relato realmente impresionante. Creo que no habia estado por aqui antes. Veo que hay material para largo rato, Un verdadero placer conocerte y seguirte. Espero pasar a menudo por aca para leer todo lo que me he estado perdiendo. Muchas bendiciones y Adelante! Tienes un Magnifico Blog.

    ResponderEliminar
  34. Lo has relatado excelentemente Daniel, una historia terrible, cruda, conocida, pero solo quien la vivió sabe hasta que punto. Me alegro que nuestro protagonista se haya salvado, y pueda de alguna manera seguir su vida.
    Mis felicitaciones.

    ResponderEliminar
  35. Daniel... Me has dejado sin palabras. Asombrada y contenta por la maravillosa manera en la que has sabido posicionar y relatar la verdadera historia de Fernando.
    Gracias, querido escritor.

    PD. Estoy conmovida.

    ResponderEliminar
  36. Uno tiene una historia para contar, y el medio perfecto en este caso fuiste vos, una escritura impecable la cual admiro y de la cual, al mismo tiempo, tomo cada vocablo para enriquecer los míos.

    Fernando me desgarró los ojos...no puedo parar de pensarlo.


    Sigo cada una de tus huellas, mirá mi blog, lo actualicé.

    ResponderEliminar
  37. Desgarrador relato, con esa intensidad que sabes plasmar en las letras. Final feliz y es de los pocos que al final vierón esperanza en tanto dolor.

    ResponderEliminar
  38. ¡Fortísimo!, no debemos olvidar jamás la Historia y además, muy bien narrado.

    Que tengas una muy buena semana.

    ResponderEliminar
  39. Daniel....terrible historia de Fernando y de los muchìsimos desaparecidos que no olvidaremos...bien conocidas por nosotros que somos de Argentina.

    un Beso

    ResponderEliminar
  40. Cuantas de estas historias pasan aun a diario en todo el mundo. Al menos él tuvo suerte de poder contarlo aunque sintiese estar muerto. No entiendo que lleva al hombre a cometer semejantes barbaridades, se nos ha ido la olla.
    un buen relato amigo.
    un abrazo desde saborescompartidos

    ResponderEliminar
  41. Daniel:
    Vengo a agradecerte las palabras que has dejado en mi espacio. En verdad las valoro, no sólo porque se tratase de un elogio, sino también porque me trajeron hasta aquí.
    Una entrada dura, pero real, yo soy brasileño, así que sé muy bien de qué se trata esta historia. Desgraciadamente muy común para muchos países de América Latina.
    Me quedo por aquí, espero que no perdamos el contacto.
    Un abrazo.
    HD

    ResponderEliminar
  42. Extremece,
    muy buen relato,
    un saludo Daniel

    ResponderEliminar
  43. Una impactante historia que seguro dejó profundas e imborrables marcas en la vida Fernando. Así de terribles y dolorosas han sido estas cruentas etapas de la historia de nuestros pueblos.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  44. Triste y real histora que conmueve... Saludos!

    ResponderEliminar
  45. Una historia muy triste,¡¡¡cuanto duele la violencia!!! cuantas lesiones sicológicas puede acarrear una situación así.
    Felicitaciones, Daniel por tu generosidad
    Buen inicio de semana
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  46. Dolorosa e inhumana realidad...escrita de una forma magistral.
    Los horrores del lado oscuro del ser humano nos dejan atónitos, sin respiración.

    Un beso Daniel, me admira tu entereza de escritor. Me voy con el alma sobrecogida.

    ResponderEliminar
  47. Daniel gracias por tu huella, pasa una semana preciosa
    besitos y luz

    ResponderEliminar
  48. Hola Fernando:

    Me alegra que te gustase como conté tu historia. Ese es mi mayor desafío gustar a quien la cede que es quien la vivió y después con suerte gustar a los demás.
    Soy uno de los que apelan para formar un círculo entre autores para conocernos y formar lazos entre nosotros. Por eso el que hayan ido tantos desde mi página a la tuya para conocerte premian mi intención.

    No quiero saludarte sin antes agradecerte la confianza que depositaste en mi para recrear tu relato. Esperando haber estado a la altura del mismo.

    Una abrazo amigo

    Tamally maak

    ResponderEliminar
  49. Pues benditos puntos suspensivos porque es una gozada leerte...una historia cargada de sentimientos y los has transmitido muy bien...desgarrador...espero poder leer algún libro tuyo si tienes editado porque lo haces genial...besos con mi ternura.

    ResponderEliminar
  50. Celebro que tu proyecto vaya viento en popa. La HISTORIA -esta historia- bien escrita. No diré más, por respeto a quienes fueron víctimas de la idiotez y la doctrina.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  51. Daniel.
    El agradecido soy yo. Con toda la humildad del caso y siemore presente para cuando me necesites, estarépresente.
    Un abrazo mi " siquiatra de cabecera "

    ResponderEliminar
  52. Con las alas del alma desplegadas al viento,
    desentraño la esencia de mi propia existencia
    sin desfallecimiento, y me digo que puedo
    como en una constante
    y me muero de miedo, pero sigo adelante.

    Con las alas del alma desplegadas al viento,
    porque aprecio la vida en su justa medida
    al amor lo reinvento, y al vivir cada instante
    y al gozar cada intento, sé que alcanzo lo grande,
    con las alas del alma desplegadas al viento.

    Con las alas del alma desplegadas al viento,
    más allá del asombro me levanto entre escombros
    sin perder el aliento
    y me voy de las sombras con algún filamento
    y me subo a la alfombra con la magia de un cuento.

    Con las alas del alma desplegadas al viento,
    atesoro lo humano cuando tiendo las manos
    a favor del encuentro por la cosa más pura,
    con la cual me alimento por mi pan de ternura,
    con las alas del alma desplegadas al viento.

    Con las alas del alma desplegadas al viento,
    ante cada noticia de estupor, de injusticia,
    me desangro por dentro
    y me duele la gente, su dolor, sus heridas,
    porque así solamente interpreto la vida.

    Con las alas del alma desplegadas al viento,
    más allá de la historia, de las vidas sin gloria, sin honor ni sustento
    guardaré del que escribe su mejor pensamiento
    quiero amar a quien vive con las alas del alma
    desplegadas al viento, al viento, al viento...

    ResponderEliminar
  53. Juraria que ya habia comentado...

    Muy bien escrita esta escalofriante historia y con buen final...te felicito por esta hermosa iniciativa...besitos con mi ternura.

    ResponderEliminar
  54. Hola Daniel, nunca voy a entender que por que se tengan diferentes ideales se tenga que detener, secuestrar y lo peor asesinar a las personas, nunca se debe imponer la voluntad a los demás, como se ha echo y sigue haciendo en dictaduras y gobiernos que se las dan de liberales y son todo lo contrario, en todos los países hemos tenido algo parecido, me alegro que al menos el protagonista lo pueda contar, aunque me imagino con muchísimas secuelas, felicidades a los dos.

    Besos.

    ResponderEliminar
  55. Impresionante historia!

    Daniel, has transmitido con tu relato todo el horror por el que paso este hombre y a la vez dejas ver que la esperanza es el mejor ingrediente de la vida.

    Un abrazo sentido!

    Para Fernando: No encuentro razón para lo que viviste y te hicieron, a ti y a tantos inocentes. Hoy veo que de aquel inmenso dolor nació un poeta y un hombre con alas de libertad.

    ¡Nunca más!

    Mis respetos, Fernando.

    ResponderEliminar
  56. La sugerencia se Fernando, relatada por la pluma de un poeta, es estremecedora.
    ¡Cuántos inocentes no han tenido la oportunidad de contarlo!
    Abrazos en el alma.
    Kasioles

    ResponderEliminar
  57. Un escritor dispuesto y creativo y álguien con una buena historia. Felicitaciones estimado Nidael Doré, Tamally Mak o Daniel Eduardo. Éxito seguro. Un saludo afectuoso.

    ResponderEliminar
  58. Dios cuanto horror!
    Se me mojaron los ojos...soy demasiado sensible a todas estas atrocidades...
    Si, ya sé que lo avisaste.. aun con todo... me resulta absolutamente atroz como los hombres pueden llegar a esos extremos de crueldad..
    Y como podemos soportar, como nos aferramos a la vida ante la injusticia, el desconocimiento, el miedo... ante el dolor y el sufrimiento..Me pregunto cómo se puede vivir despues de esto...

    Un relato absolutamente estremecedor... una historia excelentemente contada...
    Mis felicitaciones a ambos...

    ResponderEliminar
  59. Vaya impresionante, como siempre un deleite que dejas una pauta reflexiva, bien hecho.
    Me gustan nos recomendaciones musicales
    Bonitos días

    ResponderEliminar
  60. La historia es desgarradora y sabiendo que es cierta casi en su totalidad me rompe el alma, amigo

    dos abrazos a ambos y mi solidaridad con todo el pueblo argentino

    ResponderEliminar
  61. Daniel

    muchas gracias por tu huella, por suerte la vi jajaj, estaba en un post algo ya viejito,por lo general abro el último que hago y desde allí visito a los que llegan
    pasa un precioso fin de semana


    besitos y luz

    ResponderEliminar

Déjame un comentario y sera la huella que me lleve hasta tu casa