martes, 11 de septiembre de 2012

Belleza de una tierra roja (Reedición)


BELLEZA DE UNA TIERRA ROJA (Reedición)

Hola! Aun estoy de viaje. pero aprovecho una  portatil para presentar una reedición conmemorativa. (Esta es una historia verídica. Tuve la oportunidad de conocer personalmente a quienes describo, durante mis años de trabajo en el Paraguay como segundo responsable al frente de una consultora sobre temas ecológicos contratada por el gobierno de ese país. Solo he cambiado el nombre de la protagonista.)



BELLEZA DE UNA TIERRA ROJA (Reedición)

Vista desde el Windows on the World

Kuarahy, el sol, no se esconde en el Paraguay simplemente muere desangrándose sobre el cielo de la tarde volviendo más roja todavía a la tierra que sustenta. Tierra que de por sí sangra por sus propias heridas: La tala brutal de sus árboles, el corte de los brazos de sus ríos y las entrañas abiertas de sus montañas en la entrega incesante de mineral  devolviendo, todo lo que era fértil, en un panorama estéril y desolado. En ese país y bajo la atenta mirada de Tupá, el dios supremo, había nacido Carmen.

Creció acumulando toda la belleza de la raza guarany. Así, la luna abandonaba sus aposentos, detrás de las nubes, para bañarse con ella y dormirse sobre su piel. La noche soltaba sus corceles para el galope salvaje entre sus cabellos soltando estrellas entre sus ojos, mientras la blanca espuma de las cataratas se metíó en su boca para sonreír.

Fue justamente eso, su belleza, la que le ofreció tantas oportunidades en su vida, sus primeros trabajos como promotora, después algunos modelajes en fotos y pasarelas y en los últimos tiempos uno de los primeros puestos en el concurso de Miss Paraguay.

Pero, llegó el amor. Desde otra tierra diferente a la de ella, muy al norte de su continente. Él era miembro del cuerpo de ayuda humanitaria de  la embajada de su país y estaba con un contrato de asistencia a las poblaciones indígenas del Paraguay.

Fue conocerse y  enamorarse perdidamente uno del otro…

Ella sonreía, cada tarde, al escuchar el tosco castellano de él, y él le enseñaba, algunas palabras en inglés mientras caminaban sobre senderos de lajas, con verdes enredaderas trepando en altos árboles, abrazándose con ellos, de la misma manera Carmen se colgaba del cuello masculino para entregar su boca, repleta de miel, y los helechos custodiaban su paso., en tanto los pájaros entre las ramas gorgeaban para ellos la alegría de vivir.

Juntos, los dos, y por varios meses, tejieron sus sueños, mientras él le contaba de su gran ciudad con largas avenidas repletas de automóviles y gente. Con subterráneos corriendo debajo de la tierra y cientos de aviones surcando los aires, cada día. Una ciudad llena de monolitos gigantes elevando hacia el cielo sus penachos, hasta acariciar las nubes, en una muestra de orgullo tallado en cemento y cristal.

Llegada a su término la misión, de él, para la que había sido designado regresó a su país y Carmen lo acompañó. Ambos sabían que no iba a ser fácil. El debía terminar sus estudios antes de lanzarse a una carrera y ella lo ayudaría trabajando en lo que fuera, hasta que pudiera  conectarse para modelar.

Al  par de meses, de vivir juntos,  llenos de amor, entusiasmo y alegría. Vieron que sus sueños comenzaban  a cumplirse: Consiguieron en alquiler un pequeño departamento a un bajo precio y encontraron para él una plaza donde recomenzar sus estudios y para ella un contrato de trabajo como camarera del restaurante Windows on the world en el piso 106 de un alto edificio, con apoyo a una residencia provisoria en EE.UU que había tramitado él en base a unos contactos.

Como todas las mañanas Carmen, sonreía mientras preparaba el comedor tres horas antes del almuerzo. Con gran dedicación colocaba en orden preestablecido copas, vasos y cubiertos sobre las mesas. Pensando en lo inmensamente feliz que era al estar con la persona que amaba en ese gran país que le había abierto de par en par la puerta de las oportunidades para que sus sueños comenzaran a hacerse realidad.

En esto estaban sus pensamientos, cuando de pronto…un fuerte reflejo de sol le hirió fuertemente los ojos, seguidamente Carmen vio la sombra negra de un gran pájaro ensombreciendo las ventanas y provocando una fuerte explosión 8 pisos más abajo que produjo la rotura de casi todos los cristales, Una gran bola de fuego trepó velozmente desde los pisos que le separaban, consumiendo al instante todos sus sueños y su propia vida en un coctel infernal de fuego, humo y derrumbe, en un país que no era el suyo y en una guerra que ni siquiera conocía., Y que nadie hasta el día de hoy puede entender.

Eran las 08.46 del martes 11 de septiembre de 2001. El Boeing 707 del vuelo 11 de American Airlines  con 81 pasajeros a bordo se estrellaba sobre la torre norte del  World Trade Center en Nueva york. 17 minutos después un segundo avión embestía la torre sur. Casi 3000 personas morirían ese día y unas 6000 más saldrían heridas en un atentado que nos sobre pesa por lo trágico e incompresible.






El último adiós - Tributo al 11 de septiembre
Recuerda apagar el reproductor de la página antes de dar play al video.



17 comentarios:

  1. Cuánta tristeza y desolación Daniel, cuántas vidas echas pedazos, rotas por la barbarie y el odio, la codicia...
    Hermoso homenaje a tantas víctimas inocentes y a sus familias, para que nunca más se vuelva a repetir este asesinato masivo,nunca más...!!
    No hay palabras de consuelo.

    Prosigue tu viaje en paz, gracias por conmemorar este día, gracias por recordarlos.

    Un fuerte abrazo a tu gran corazón!!!!

    ResponderEliminar
  2. Muy poco puedo adicionar al magnifico articulo que haz publicado, solo puedo decir que lo mejor del Paraguay son sus mujeres.

    Imaginate una nacion desangrada, que por azares de la historia quedo sin hombres en una guerra fraticida.

    Asi que esa mujeres Paraguaya a puro corazon y valentia mantuvieron un Pais.

    La mujer Paraguaya es puro Valor. Garra.

    Saludos

    PD: Aprendi algo de este articulo, con una sola palabra que dice...reedicion.... vaya nunca se me hubiera ocurrido re-editar una entrada mia.... gracias por el consejo.

    Firmado

    Otro Blogger

    ResponderEliminar
  3. La verdad es que no recuerdo haberlo leído antes, así que bienvenida sea la reedición porque es un texto maravilloso y emotivo, triste y conmovedor, así como el video.

    Por cierto, yo siempre detengo la música de blog, pues está a un volumen demasiado alto e impide leer los textos con atención... Bueno, son estilos.
    Un abrazo, Daniel.

    ResponderEliminar
  4. hola Daniel,
    qué increíble que hayas conocido alguien que haya tenido esa experiencia tan cruel y que no tiene nombre, porque los danos y heridas que ocasionó esse hecho son incurables, y nunca se borrarán de las mentes.
    Espeluznante historia, Daniel.


    un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Me has llevado de nuevo a aquel terrible año, y me has hecho de nuevo ver ese edificio lleno de llamas,y gente corriendo,y las personas que no se veían porque quedaron atrapadas en aquel infernal fuego.Un amor y sus sueños truncados,cuantas personas quedaron en un pis-pas, sin sus seres queridos, esparcidas en la nada...Una historia como siempre Daniel con tu lujosa pluma, me encanta como plasmas lo que pasa por tu cabeza y corazón.Que tengas buen viaje.

    ResponderEliminar

  6. Fascinante interacción, siempre haciendo de la historia “La historia”
    Felices vacaciones. Saludos afectuosos

    ResponderEliminar
  7. Cuanto dolor, que no sana, y no sanará, la vida del mundo cambio apartir del 11 de septiembre, tantas vidas de personas que fallecieron y tantas que salieron heridas como Carmen,... más que lamentable suceso, que nadie olvidara ni puede cambiar, pero que si marco con huella de solor profundo al mundo entero. Extraordinaria anotación, un fuerte abrazo, mi querido Daniel

    ResponderEliminar
  8. La vida misma en una narración bella. Nada más.

    ResponderEliminar
  9. La belleza hay que admirarla en su estado puro.

    Saludos

    ResponderEliminar
  10. Que pena por todas las víctimas de este lamentable suceso, sin duda fueron muchas las historias truncadas por semejante acto terrorista.

    Besitos.

    ResponderEliminar
  11. septiembre es un mes que recuerda muertes y dolores
    la historia en sus pasajes a veces es demasiado cruel
    desde este Chile en donde el perdón y el olvido siguen en pugna

    un abrazo

    ResponderEliminar
  12. Cada vez que retrocedo en el tiempo y recuerdo el suceso...uffff
    El temblor se me apodera de nuevo.
    Terrible saber que miles miles de vidas fueron truncadas por culpa del irraciocinio y la crueldad.
    Besos.

    ResponderEliminar
  13. Creo que está bien recordarlo; más aún, creo que es necesario no echar en el olvido el dolor de otros.

    Un beso muy grande y sigue tus vacaciones disfrutando.

    ResponderEliminar
  14. Estimado Daniel, me place mucho visitarte nuevamente y disfrutar de tus siempre interesantes relatos, que nos transmiten mensajes y reflexiones.
    En esta ocasión has interrelacionado una linda historia de amor con un suceso trágico que nos conmovió a todos y todavía nos continua impactando,y generando en nuestra mente muchas interrogantes sin respuesta.
    Cuantas historias de amor se vieron truncadas ese nefasto día por culpa de esas mente fanáticas e irracionales.
    Nuevamente te felicito por tu hermoso blog y le he dado un vistazo en retrospectiva para ver de lo que me he estado perdiendo.
    Que disfrutes tu viaje y recibe un fuerte abrazo desde el perdiendo Bohemio.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  15. Se me ponen los pelos de punta Daniel, vivir aquello tuvo que ser escalofriante. Disfruta de tu viaje, pero vuelve pronto amigo, se te echa de menos. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
    http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  16. Que se puede decir ante tanto horror, un acto incalificable, algo que jamas comprenderemos.
    Nunca debemos olvidarnos!!!
    Muy buena entrada!!
    Cariños....

    ResponderEliminar
  17. Un hecho mas de los muchos que acontecen ultimamente, lamentablemente Daniel, de mayor o menor daño, pareciera que vamos directo hacía un solo fin, triste historia y sus consecuencias.

    Besos Daniel

    ResponderEliminar

Déjame un comentario y sera la huella que me lleve hasta tu casa